lunes, 26 de julio de 2010

Por siempre...


By:Chaparra

Nunca te di un nickname, tal vez porque solo mirar tus ojoso transmitía una energía que demostraba que necesitaba algo de ti y volteabas.Para mí, de chiquita, tu música era peor, no la captaba y mucho menos la entendía pero un día escucha Alanis y ahí todo cambio.
Mi ipod bien podría ser una copia de cualquier playlist que tengas, hoy tu música la siento en cada parte de mi ser. Cuando todos los demás me decían Anita, tu simplemente me decías “Chaparra”, porque soy tu chiquita. A la que defendías, ayudabas, respetabas, entendías. Y
Sabes? Tú y yo siempre tuvimos el mismo carácter de miedo, la misma necesidad de llamar la atención y el mismo sentido de pertenencia a nuestro hogar.Decir adiós o despedirme es tan irreal, porque aquí estas, en mi.Tú me enseñaste que al metro no se le “hace la parada” me llevabas a lugares lejanos sin nada a cambio y nunca me cobraste el sweater que prometí pagarte.Cuando supiste que me había enamorado de tu música se que dibuje una sonrisa en ti.
No sé, no creo y estoy segura que jamás conoceré a alguien tan apasionao, inteligente y noble como tú.
Y siguen las palabras, las lagrimas pero sobre todo el deseo de que una vez más escuche tus pasos arriba de mi recamara.Siempre discutíamos, pero siempre teníamos la razón y nunca te lo dije pero casi siempre tú la tenías.Supiste hacer loes mejores amigos que ninguno de tus hermanos hemos podido hacer, amigos que estuvieron están y estarán.
Yo todavía no estoy segura de encontrar a los míos.Tus convicciones nunca se doblegaron y tu inteligencia callaba a la mayoría.
Te amo por tu inteligencia, tu razón y sobre todo porque al final el día siempre sabias lo que pasaría…Por ti, para ti… tu, serás mi más grande inspiración, mi hermano mayor.
Hermano de sangre, te amo hasta el final de todos los tiempos.

1 comentario:

  1. Es verdad que con sólo saludarlo sabías que era un ser muy noble y su forma de ser callada y observadora delataba su inteligencia. Siempre estará presente de alguna forma en tu vida y en la vida de la gente que lo conoció.
    Y no es un adiós, es un hasta pronto hermano postizo.

    ResponderEliminar